sábado, 16 de abril de 2011

30.

Bote solitario






El ocaso ha cogido ya

su camino a casa, Helios

está aburrido de observar

a través de las ventanas.


Contemplo el hermoso

camino que traza el paso

de una simple potencia

que se ha convertido

en un poema ebrio de amor.


Una botella que estalla

golpeándose la barrera

de la zona que nunca

debimos atravesar.


Solo en mis ojos queda

parte de la nada,

la que hasta ahora he

conseguido ver.


He comprendido

como mejor puedo

somos artista y bloque

y tenemos que estar

dispuestos a tallar.


Pero no entiendo por que

existe tanto miedo cuando

se trata ser uno e irrepetible

el humano trata de ser igual a.




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