jueves, 28 de abril de 2011
Plan de escape (Tetralogía Haiku)
sábado, 23 de abril de 2011
Emergen como placas de corcho recuerdos en mi interior
El futuro es una partitura
vacía
compositores, intérpretes, músicos, directores
de una obra
impregnada con nuestra esencia (y la de otros).
Tu eres motivo intermitente
del movimiento
en el que me encuentro sumergido
mezcla
de un allegro y un adagio a contratiempo.
He llegado a la conclusión
somos
puntos sin dimensión vagando
en este universo
alimentándonos de fuerzas exteriores.
Eso que llaman filosofía
surge
del anhelo de aprehender
la realidad
en sus múltiples límites incalculables.
El amor es una dolencia crónica
y el tiempo
es remedio temporal para tapar
sus heridas
resultado de enfrentarse a uno mismo.
Es un ideal entre ideales, entre
varias
opciones posibles, la determinación
inconsciente
la que sigue el deseo, la mitad del alma.
Derrocho optimismo pensando
un día
el velo se correrá y podremos vernos
las caras
y tus ojos a un centímetro otra vez.
Las palabras son el cruel reflejo del
alma
unas veces tan claras y otras veces
robadas
al pasado oculto en los recuerdos.
lunes, 18 de abril de 2011
Anacronismos en mis pensamientos
La ficción es un elemento de supervivencia.
Es combustible para la hoguera de la imaginación.
El deseo y los sueños se elevan con el calor
como el vapor de la olla lucha por ir hacia arriba.
La realidad se deforma
en los botellones
de la ciudad.
He advertido en mi a base de pequeños destellos
podemos percibir mejor los resquicios mentales
yendo hacia la pequeña parte que nos hace diferentes
admirando en toda su complejidad este inmenso azar.
Como antiguo culto a
Deméter sin base
existencial.
Paradigma exento de idea de triunfo alguno
consecuente con los principios de la empatía.
Testigo de un código secreto entre mis palabras
y mi inconsciente que se resiste a revelarse.
sábado, 16 de abril de 2011
30.
El ocaso ha cogido ya
su camino a casa, Helios
está aburrido de observar
a través de las ventanas.
Contemplo el hermoso
camino que traza el paso
de una simple potencia
que se ha convertido
en un poema ebrio de amor.
Una botella que estalla
golpeándose la barrera
de la zona que nunca
debimos atravesar.
Solo en mis ojos queda
parte de la nada,
la que hasta ahora he
conseguido ver.
He comprendido
como mejor puedo
somos artista y bloque
y tenemos que estar
dispuestos a tallar.
Pero no entiendo por que
existe tanto miedo cuando
se trata ser uno e irrepetible
el humano trata de ser igual a.
martes, 12 de abril de 2011
Veisalgia cruel
Estado de putrefacción mental
inherente a la sobredosis de alcohol
ebrio decidí redactar mis conclusiones
y observarlas en un tarro con formol.
Sobrio contemplo el desastre en mi cuerpo
demasiada actividad cerebral de repente
colapsa el intrínseco inconsciente siendo
el resultado arcadas en forma de versos.
Recuerdo ver las intenciones plasmadas en el aire
avizor ojo intuitivo concluye automáticamente
somos un compendio de ocultos intereses
que vagan a sus anchas formándonos personas.
domingo, 10 de abril de 2011
Nº 0904-2011: Ergo.
Desde una esquina, apoyado contra un muro Jack Red está fumándose un cigarro. No le gustan las acumulaciones de gente. Y allí había demasiada gente. En su mente deambulan pensamientos extraños y distintos entre sí. Sugeridos por la sucesión de acontecimientos del momento, fruto de una relación causal entre momento, recuerdos y experiencias pasadas. La multitud ruge, es un sumar constante de conversaciones, como las gotas de lluvia forman el sonido del aguacero. Pero el aguacero conserva su belleza natural. Entre los grupos de gente corre el alcohol, lo que une de un modo seguro a todas las personas allí. También hay otras cosas, como el inicio de la primavera, la llegada del calor y las ganas de jodienda. Aquí las intersecciones son virtuales, como hilos invisibles que van desde un punto hasta otro. De vez en cuando una joven levanta la mirada y ata un cabo momentáneo, espontáneo, fruto del azar. Su mirada ha cruzado con la de otro chico. Durante un segundo ambos han sido testigos de ser observados y observar al mismo tiempo e inconscientemente el cerebro prefiere mirar hacia otro lado, posiblemente sea por que anteriormente hubo un trauma amoroso de por medio. Quién sabe. El caso es que pasa. Luego da igual, pasa lo que para. Simplemente llegamos a nuestras casas, nos quitamos nuestras máscaras. Y mañana será otro día (en el mejor de los casos).
La música suena de lejos, las ondas vienen rebotando por los callejones hasta llegar a la plaza. Hoy en día poca gente entiende la música. Casi siempre es excusa para bailar o hablar encima de ella, sin prestar atención. Sin escuchar música. Escuchar música es difícil, requiere tiempo, concentración, ganas y, sobre todo, hay que abrir la mente. La música es algo más que un conjunto de notas, hay un trasfondo enorme. Normalmente no sabemos darle el respeto que se merecen algunas cosas. De esto no tenemos culpa nosotros solos, aunque somos los únicos que podemos remediarlo. Pero realmente no está muy fácil eso que llaman cultura. Si no, ¿de dónde sacarían los políticos e imbéciles que nos dominan el dinero para sus lujosas mansiones e interminables riquezas? Y de tal palo, tal astilla. Jack recuerda que desde niño cerraba los ojos para sentir mejor los instrumentos. Subía el volumen hasta el máximo. A pesar de que su padre le avisaba que acabaría sordo si no lo bajaba. “Quiero escuchar los detalles, papá”.
Solo queda resignarse y seguir la corriente. Aceptar que el virus nos ha carcomido ya y dejar que llegue el final cuando tenga que llegar. Pero también esta la opción (más difícil) de combatir contra el curso de la historia, romper ese ciclo que nos hace caer en los mismos errores de siempre. Superarse, aprender, disfrutar de la vida y sus pequeñas cosas. Jack piensa todas las mañanas en estas cosas. Pero como todo ser humano, falla.
Han dado las dos de la madrugada en el reloj del ordenador. Automáticamente su mirada perdida en la nada se ha desvelado al fijarse en cómo avanza el reloj. Reflejo de estar esperando algo, impaciente. Pero sabe que no espera nada. O que lo que espera no vendrá, condenado a un círculo vicioso en el que sabe que a la vez es pez, agua y el mismísimo jodido círculo que dibuja.
Un cigarro más y a la cama. En esta frase “cigarro” y “cama” pueden ser muchas cosas.
jueves, 7 de abril de 2011
Enésimo enigma del reducto existencial
Sólo cuando pongo en entredicho
mis verdades
salen realmente limpios los pensamientos
existenciales.
La duda alberga la paradójica
certeza
de nunca mantener dormida
la cabeza.
A través de mis palabras
se manifiestan
sórdidos sentimientos
que me infectan.
En ocasiones suelo tirar
de mis raíces
no pudiendo olvidar jamás
lo que dices.
No puedo afirmar
ser libre
pues eres yugo
invisible.
Tampoco puedo evitar
conjugarte
en estos versos desprovistos
de arte.
Pues tus besos son la más
potente
droga que jamás probó
mi ente.
Soy consciente de que ciclos
internos
me hacen desfilar hacia mi propio
averno,
No eres tu, soy yo enésimo frustrado
intento
recluido por propio afán en ese sutil
infierno.
domingo, 3 de abril de 2011
Efímera constatación de un sentimiento inservible
Absurdo
como hacerse la víctima para dar pena
mejor mantenerse frío y aprender
de los problemas de la vida
que son la solución de otros.
La sinceridad se agota
se derrochó en los botellones
el sentimiento interior ebriamente aflora
recordándose como
motivo de risa y locura pasajera.
Pocos saben (o quieren)
aprovechar los efluvios
que los confirman como humanos,
cayendo en una perpetua dicotomía
entre ignorancia y felicidad.
Lucho por vivir
cambiando continuamente
el modelo de paradigma culpable
de ser quien soy
aunque no lo consiga nunca.
Porque somos
el fruto de miles de intersecciones
en nuestra mente, y la mía, redunda
en un trastorno bipolar
del cual no me consigo olvidar.
Cuando eres motivo
de que mi inconsciente haga
cosas absurdas, eso que llaman amor,
se vuelve contra mí y delega a mi cuerpo
a la función de triste espectador.